El maquillaje más favorecedor según el color y forma de ojos

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Todos somos diferentes y nuestros rasgos son los que definen nuestra belleza. Por esta razón, es fundamental conocer cómo maquillar cada parte de nuestro rostro, especialmente los ojos. Seguramente, tienes un cajón lleno de sombras en tu tocador, pero acabas siempre utilizando los mismos colores. Esto puede ocurrir porque no sabes cómo usarlas y sacar el máximo partido a cada una de ellas.

Es crucial que comprendas la importancia de potenciar la mirada y resaltar los rasgos faciales. Sin embargo, para lograr estos efectos, es imprescindible que conozcas tu forma de ojo y las técnicas de maquillaje más adecuadas para ti, ya que cada uno requiere un enfoque distinto. Por ejemplo, si son almendrados puedes beneficiarte  de una técnica de sombreado que realce tú forma natural. Por otro lado, si son hundidos necesitas un enfoque que abra la mirada y evite que el párpado móvil desaparezca al abrirlos.

No temas salir de tu zona de confort y probar nuevos estilos. Con el tiempo, aprenderás qué técnicas y colores funcionan mejor para ti, potenciando tu belleza única. Por ello, queremos darte unos consejos específicos. ¡Corre, sigue leyendo y descubre cómo realzar tu mirada como nunca antes!

Según la forma de los ojos

Ojos juntos 

La distancia ideal entre un ojo y otro, para que el rostro luzca en armonía, debe ser igual al tamaño de un ojo. Sin embargo, si el espacio es menor, tienes los ojos juntos. Para maquillarlos a tu favor, primero coloca una sombra perlada desde el lagrimal hasta el iris. Luego, aplica una sombra más oscura en las esquinas exteriores, y el delineado debe comenzar desde la mitad del ojo y extenderse hacia los extremos. 

Ojos separados 

Ahora bien, si la distancia entre tus ojos es más amplia que la de uno solo, es importante considerar que están más separados de lo normal. Para reducir visualmente este espacio extra, comienza por difuminar una sombra café oscura desde el lagrimal hacia afuera, siguiendo la forma natural del globo ocular. Además, los delineados egipcios, que acentúan el lagrimal sin rodear toda la mirada, lograrán un impacto espectacular en tu look.

Ojos saltones y prominentes 

¿Quieres saber si tienes este tipo de ojos? Para averiguarlo, párate con la cabeza viendo al frente y coloca la punta del dedo índice en el hueso de la ceja, mientras el resto de la mano está a la altura del pómulo. ¿Qué ocurre al abrir y cerrar los ojos? Si el párpado toca el dedo tienes ojos prominentes. ¿Cómo sacarles el máximo partido? Maquíllalos con un smokey eye oscuro, usando negro o marrón, y aplica una sombra de transición en tono medio, como naranja, lúcuma o fucsia clara, en el párpado fijo, difuminando muy bien. Además, delinea tanto la línea de agua superior como la inferior con negro para un efecto impresionante. 

Ojos pequeños hundidos  

¿Tus ojos parecen considerablemente más pequeños en comparación con otras facciones de tu rostro? Si es así, ¡no te preocupes! Aquí tienes algunos tips infalibles: utiliza siempre una sombra clara en todo el párpado móvil para abrir la mirada. ¿Te gustaría añadir un poco de profundidad? Entonces, opta por sombras en tonos bronce, mauve o melocotón. Difumina estas sombras desde el pliegue del ojo hacia arriba y extiéndelas ligeramente por fuera de la línea inferior de las pestañas. El delineado aquí juega un papel muy importante, desliza un negro en la línea superior externa para conseguir abrir la mirada y hacerlos parecer más grandes. 

Ojos rasgados  

También conocidos como orientales, los ojos rasgados poseen una característica distintiva: la aparente ausencia de pliegue. Para lograr que estos ojos se vean más grandes y estilizados, primero aplica una sombra oscura en el párpado móvil. Este tono profundo ayuda a crear una base que añade profundidad a tu mirada. A continuación, añade una sombra con un toque de color en la V externa del ojo. Este paso es crucial, ya que, al extender el color por debajo de la línea de las pestañas inferiores, se consigue un efecto de amplitud que realza la forma de los ojos. Finalmente, ilumina la zona del lagrimal hacia arriba con una sombra más clara, transformando tus ojos rasgados en un punto focal cautivador y elegante. 

Según el color de ojo 

¿Te has preguntado alguna vez cómo puedes hacer que el color de tus ojos destaquen aún más? La respuesta está en el contraste. 

Para los ojos marrones y negros, les favorecen los tonos verdes, azules marinos, marrones, ocres, dorados, azules. Si tus ojos son verdes, intensificar su color con tonos morados, violetas, marrones, verdes y dorados.  Y si tienes ojos azules, te irán genial los tonos plata o grises metalizados, dorados y azules. 

Todos somos diferentes y nuestra belleza radica en esos rasgos únicos que nos definen. Aprender a maquillar tus ojos de manera adecuada no solo potencia tu mirada, sino que también realza tu rostro. Así que, la próxima vez que te sientes frente a tu espejo, recuerda que en tu colección de sombras hay un mundo de posibilidades esperando a ser descubierto.

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