Corregir arrugas de expresión, rejuvenecer labios, redefinir el óvalo facial, levantar glúteos, eliminar celulitis… Hay deseos que no cambian, pero sí la manera de conseguirlos. Las nuevas técnicas en el campo de la medicina estética, cada vez más precisas y menos invasivas, permiten resultados eficientes y naturales. Vamos a ver lo que nos depara este año de la mano de los mejores especialistas en medicina estética.
Por Pilar García Vázquez
Los tratamientos para el rejuvenecimiento del rostro lideran siempre los rankings de lo más demandado en medicina estética, y lo seguirán haciendo durante este año. El uso de la mascarilla ha influido en dos factores: por una parte, el deseo de rejuvenecer la zona superior del rostro, que es la que queda al descubierto; y por otro, aprovechar para tratar la parte inferior, ya que permite disimular la hinchazón o los pequeños hematomas de algunos tratamientos. ¿Seguirá siendo así?
La doctora Cristina Villanueva, médico estético especialista en estética facial, nos lo aclara: “La mascarilla sigue muy presente en nuestras vidas y, con ello, el foco sigue centrado en el tercio superior y la zona de los ojos. Se realizan muchos tratamientos combinados de toxina botulínica para las arrugas de expresión y, a la vez, la fatiga pandémica también hace que nos queramos ver mejor, con menos cara de enfadados, suavizando las arrugas del entrecejo”. Como consecuencia, la doctora destaca tres tendencias que seguirán en auge a lo largo del año.
- Refrescar la mirada. Con peelings específicos para los párpados, pero que se pueden combinar con tratamientos de biorrevitalización facial con unas agujas novedosas que no dejan moraditos ni duelen. También con el uso del láser fraccional no ablativo, que se utiliza para mejorar las arrugas finas de toda la zona periocular.
- Revitalizar la piel. Otra de las consecuencias de la pandemia es que, al ocultar el rostro con la mascarilla, hemos prestado menos atención a la piel. Pero también porque su uso provoca rozaduras y diferentes tipos de erupciones cutáneas. Están aumentando las limpiezas médicas con dispositivos punteros que proporcionan una higiene e hidratación profundas y preparan la piel para otros tratamientos. “El acné y la rosácea lo tratamos con terapia fotobiodinámica con sustancias fotoactivas y luz led”, añade la doctora Villanueva.
- Prevenir el envejecimiento. Cada vez somos más conscientes de ello y preferimos adelantarnos a lo que, sin duda, es inevitable. Para prevenir el envejecimiento se realizan tratamientos como la redensificación cutánea, la biorrevitalización o la prevención de las arrugas de expresión con toxina botulínica. También hay una demanda creciente de consejo dermocósmetico. Según la doctora, “los pacientes tienen mucha información, pero a veces confunden tratamientos y buscan asesoramiento”.
Cada vez prevenimos más el envejecimiento. Para ello se emplean tratamientos como la redensificación cutánea, la biorrevitalización o el uso de toxina botulínica antes de que aparezcan las arrugas
Labios happy
Este año, además, decimos adiós a los voluminosos labios “russian”, que pasarán a formar parte del pasado con resultados, a veces, dignos de olvidar. Ahora en el relleno labial lo que impera es la naturalidad y unas proporciones que armonicen con el rostro. Bocas jugosas e hidratadas, casi con un efecto “glossy” para impactar sin llamar poderosamente la atención.
Para la firma Sinclair Pharma, los labios más buscados en las consultas de medicina estética serán los llamados happy lips. Un mínimo aumento de volumen, casi como una hidratación, con un ligero perfilado inyectado en la mucosa labial para elevar ligeramente la zona exterior y alegrar la expresión del rostro. Respetar la mímica facial y las proporciones es el objetivo.
Adiós a las intolerancias
El número de personas preocupadas por optimizar el proceso de envejecimiento es cada vez mayor, y los avances científicos y tecnológicos permiten mejorar los resultados. Para la doctora Gema Pérez Sevilla, experta en cirugía y medicina estética, hay tres tendencias que definirán 2022.
- Kit para prevenir rechazos. Se popularizan los test rápidos que detectan posibles intolerancias a los productos de relleno. Aunque la seguridad de los fillers es cada vez mayor, al no ser un producto autólogo siempre cabe la posibilidad de que se produzca algún rechazo.
- Inyección de fillers ecoguiada. Se utilizará la ecografía mientras se hacen las infiltraciones con toxina botulínica o los rellenos. Con esto se gana en precisión y seguridad, lo que mejora sustancialmente el resultado. “Creo que es algo muy positivo para médicos noveles, ya que permite ver dónde se encuentran las estructuras musculares y vasculares en el momento de hacer la infiltración, de forma que se pueden evitar ciertas complicaciones”, asegura la doctora Pérez Sevilla.
- Láser CO2 para las arrugas faciales. Asistir las cirugías con láser disminuye el tiempo de recuperación y las complicaciones asociadas, pero la doctora asegura que “igualmente veremos cómo se combina el láser de rejuvenecimiento con los productos de relleno para hacer los tratamientos más completos. Así, usaremos inyectables, por ejemplo, para restablecer volúmenes perdidos y mejorar arrugas, y después con el láser CO2 se mejorará la calidad de la piel”.
Las infiltraciones serán más seguras. Por ejemplos, con los kits de prevención de intolerancias a los rellenos o las intervenciones ecoguiadas
Auge de los tratamientos combinados en medicina estética
Que se vean los resultados, pero sin evidenciar el retoque, es el final feliz de toda intervención. Y personalizar tratamientos de acuerdo a las facciones de cada uno, combinando diferentes técnicas y productos, se impone en la lucha por la naturalidad.
Para el Instituto Médico Láser (IML), lo que determina verdaderamente el envejecimiento no son las arrugas, sino el triángulo facial invertido, o lo que es lo mismo, el descenso de las facciones que va deformando el rostro con la edad. Reposicionar estos volúmenes es el objetivo de su tratamiento Youth Triangle Recovery, un conjunto de técnicas mínimamente invasivas que se realizan de arriba abajo, de manera personalizada, con la idea de conseguir un efecto natural.
¿Cómo? Trabajando ojos, pómulos y mejillas, el surco nasogeniano, las llamadas “cocochas” y el descolgamiento del cuello. Vamos paso a paso: la cuenca hundida del ojo se suaviza con ácido hialurónico. Para restaurar el volumen perdido en pómulos y mejillas se hace un estudio previo con intención de no infiltrar más del que se tenía antes. Respecto al surco nasogeniano, en IML consideran que a partir de los 35 años no se debe rellenar, sino atacarlo aumentando la tensión facial mediante un relleno estratégico que se trabaja desde la mitad de la mejilla hacia la oreja, según las necesidades de volumen en cada paciente.
Por su parte, las conocidas “cocochas” que se forman a ambos lados de la boca y que restan definición al mentón se tratan con un suave relleno del reborde mentoniano que colabora en la tensión del ángulo mandibular. Por último, para reparar el descolgamiento del cuello se colocan hilos de doble aguja. También se puede tratar simultáneamente mediante el implante de tramas tensoras a base de ácido hialurónico e hidroxiapatita cálcica.
El bótox que viene
Si hay un tratamiento estrella dentro de la medicina estética es la toxina botulínica. Ha demostrado su eficacia en las arrugas de la frente, el entrecejo y las patas de gallo, y está en permanente evolución para mejorar resultados. Llegarán algunas para facilitar el trabajo del profesional, para hacerlo más preciso; y otras, para innovar en producto y lograr nuevas prestaciones. O, al menos, eso es lo que se espera.
Las formulaciones que están al caer, son:
- El K Botox o toxina coreana. Aunque tras las pruebas realizadas no presenta grandes diferencias con las actuales, esta ha despertado mucho interés porque se anunció que sería un 30 % más barata. Habrá que esperar para comprobarlo.
- La daxibotulinumtoxina o toxina americana, que contiene una proteína que limita la difusión del producto, lo que hace que se fije en los tejidos durante más tiempo. Y algo que muchos estaban esperando: su formulación sin albúmina permitirá aplicarlo en pacientes alérgicos al huevo.
- Por último, otra novedad que podría llegarnos a lo largo del año es el bótox líquido, el Innotox. El hecho de no tener que hacer la dilución en consulta asegura una dosis más precisa del producto. Y también se puede usar con alérgicos al huevo.
Además, hay otras dos novedades en el horizonte (aunque no sabemos si de este año). Es el caso del Bótox E, perfecto para quienes quieran probar antes de decidirse por un tratamiento más duradero, ya que su efecto se reduce a un mes como máximo frente a los cuatro o seis de los actuales.
Y, por último, la toxina botulínica tópica, un producto en gel o crema que se espera con ganas tras años de investigación, pues servirá para acabar con el exceso de sudoración axilar y también para las arrugas faciales, especialmente las del contorno de ojos.
Llegarán nuevas formulaciones de toxina botulínica. Se espera que aporten mayor precisión, mayor duración o incluso que alguna cueste menos. Pero todo está por ver
El cuerpo pide más
Celulitis, flacidez, estrías, grasa localizada, cartucheras… El cuerpo sigue pidiendo tratamientos que mejoren su aspecto de la manera menos invasiva posible. Pero ¿cuáles son los más demandados? Se lo preguntamos a la doctora Antonia Alonso, de la unidad de Medicina Estética de Quirón Salud Aribau: “Continúan siendo la mesoterapia y carboxiterapia. Son tratamientos bien conocidos por nuestros pacientes; efectivos, compatibles con la vida normal y asequibles. Sin embargo, la tendencia actual es el abordaje a diferentes niveles. Para ello contamos con equipos que actúan selectivamente según la zona que queramos tratar”.
Y estos son los dos grandes focos a batir:
Grasa localizada. Normalmente se acumula en abdomen, flancos, cartucheras y región subglútea. Además de las infiltraciones lipolíticas, se ha extendido el uso de la criolipólisis. Una aplicación externa de frío con el objetivo de congelar el adipocito y desencadenar su eliminación por apoptosis. “También tratamos la grasa localizada con radiofrecuencia y ultrasonidos, un procedimiento que aporta tensado cutáneo”, añade la doctora Alonso.
Fuera celulitis. Se manifiesta sobre todo en el tejido subcutáneo y mejora significativamente con la aplicación de ondas de choque, masaje subdérmico, radiofrecuencia externa y radiofrecuencia con agujas.
Glúteos al alza
Lo pusieron de moda hace unos años las hermanas Kardashian y ahora es objetivo prioritario de todo cuerpo fit. Conseguir unos glúteos prominentes y bien definidos es una dedicación de horas y horas en el gimnasio. Para los expertos de Sinclair, la proporción perfecta debe concentrar el 40 % del volumen en la mitad superior del glúteo y el 60 % restante en la inferior.
Pero, ¿qué pasa cuando no se quiere recurrir a implantes, o las sesiones de gym no dan el resultado esperado? Pues que llega al rescate el ácido poliláctico. Como explica la doctora en medicina estética Victoria Páez, “a diferencia del ácido hialurónico, de vida corta, y de los poco valorados implantes de silicona, el ácido poliláctico se comporta como un relleno dérmico bioestimulante que produce colágeno nuevo y mejora la firmeza, además de aumentar el volumen donde sea necesario, redondeando las formas de una manera muy natural con una duración de hasta dos años”.
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