El Doctor Edward Bach era un médico, investigador y homeópata que dejó como legado las conocidas Flores de Bach que hoy nos ocupan. Tras investigar durante años con las flores de su región, Gales, desarrolló la Terapia de las Emociones en la que concluía que todo conflicto emocional no tratado podría degenerar en una enfermedad física. Tratando el problema afectivo, podrían entonces solucionarse las otras dolencias.
Con el aumento de las terapias alternativas y naturales, ha incrementado el interés hacia estas flores, que no se incluyen en lo que conocemos como medicina tradicional.
Qué son las flores de Bach
Las flores de Bach son esencias naturales que forman parte de una terapia floral conocida por sus efectos sobre el estado de ánimo, sobre la ansiedad, el miedo o la tristeza. Se administran 38 preparados naturales en función de los síntomas psicoemocionales del paciente para que los alivien y se vuelva a un estado equilibrado de tranquilidad y paz.
Otros sistemas florales conocidos son el del Desierto Florido de Chile, el de las Flores de Australia (Bush Flower Remedies) y el de las Esencias de Madrid.
Cómo administrarlas
Al igual que los remedios homeopáticos, la importancia según el mismo Dr Bach reside en la frecuencia de las tomas y no en la cantidad.
Recomiendan no tomarlas en la hora previa o posterior a las comidas.
Por vía oral
Colocando de 1 a 3 gotas en un vaso de agua para que se disuelva con el vaso tapado. Se irá bebiendo el vaso a lo largo del día.
Sublingual
Es la manera recomendada cuando los síntomas hayan aparecido repentinamente. La pipeta no debe estar en contacto con la boca. Se colocan cuatro gotas debajo de la lengua y no se tragan.
En la bañera
En la bañera, con agua tibia, se echan cinco gotas. Se aconseja como complemento de la administración vía oral.
Externa
Se puede administrar en cremas de base acuosa, lociones o geles sobre la piel. O mojar un paño con la esencia para hacer suaves refriegas por el cuerpo.
El debate sobre la eficacia de las flores de Bach
Como decíamos antes, este remedio está basado en la Terapia de las Emociones del Dr. Bach, que relaciona el estado mental y emocional con la causa de una enfermedad. Esta visión más integrativa de la medicina defiende que si se estudia y se trata la raíz emocional del problema, se solucionará la enfermedad física.
Y aunque este tipo de terapia suele presentar mucha controversia con respecto a su efectividad, es cierto que algunas revisiones y estudios tienen efectos positivos. Algunos lo explican como efecto placebo y otros confirman sus efectos.
Parte de la comunidad científica se posiciona en contra debido a que estos estudios son reducidos, pocos serios y científicos. La Organización Médica Colegial (OMC) no reconoce esta terapia como una práctica médica, sino que la definen como un método para producir satisfacción y tranquilidad al paciente, pero no como un procedimiento terapéutico.
Cuáles son las 38 flores
Las 38 flores de Bach son las siguientes:
Agrimony (agrimonia), aspen (álamo temblón), beech (haya), centaury (centáurea), cerato (ceratostigma), cherry plum (cerasífera), chestnut bud (brote de castaño), chicory (achicoria), clematis (clemátide), crab apple (manzano silvestre), elm (olmo), gentian (genciana de campo), gorse (aulaga), heather (brezo), holly (acebo), honeysuckie (madreselva), hornbeam (hojarazo o carpe), impatiens (impaciencia), larch (alerce), mimilus (mímulo), mustard (mostaza), oak (roble), olive (olivo), pine (pino), red chestnut (castaño rojo), rock rose (jarilla) rock wáter (agua de roca), scleranthus (scleranthus), star of bethlehen (leche de gallina), sweet chestnut (castaño dulce), vervain (verbena), vine (vid), walnut (nogal), wáter violet (violeta de agua), white chestnut (castaño de indias), wild oat (avena silvestre), wild rose (rosa silvestre) y willow (sauce).
Estas 38 flores se dividen en 7 grupos según su efecto emocional:
Grupo 1: para combatir el temor y el miedo.
Grupo 2: para acabar con la incertidumbre.
Grupo 3: para combatir la apatía.
Grupo 4: para luchar contra el sentimiento de soledad.
Grupo 5: para acabar con la hipersensibilidad.
Grupo 6: para la desesperación.
Grupo 7: para los excesos de preocupación.
Beneficios de la terapia floral
Entre los beneficios y ventajas que se le adjudican, encontramos:
① Pueden ser tomadas por personas de cualquier edad.
② No se le conocen efectos secundarios.
③ Poseen cualidades energéticas que favorecen al paciente.
④ No son adictivas.
⑤ Producen un estado anímico positivo.
⑥ Son complementarias a otras terapias y medicinas.
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