Cómo combatir la flacidez con ACEITES REAFIRMANTES

Flacidez Y Aceites Reafirmantes
aceites para la flacidez

Nuestro cuerpo atraviesa numerosas etapas a lo largo de la vida: fluctuaciones de peso, embarazos, estirones o incluso musculación, y todo ello hace que nuestra piel comience a ceder, y la flacidez y la piel caída empiecen a notarse. Este proceso es algo totalmente normal que tarde o temprano acaba ocurriendo, y podemos considerarlo como un recordatorio de todo lo que nuestros cuerpos han atravesado. Pero también es totalmente normal querer sentirse mejor con uno mismo, y algunos cosméticos, como los aceites reafirmantes, pueden servir de gran ayuda si sabemos utilizarlos correctamente.

Flacidez y envejecimiento de la piel: causas y remedios

Salena Sainz, farmacéutica y dietista nutricionista y Fundadora y directora de Naturae nutrición y CEO de Annue Body Elixir explica que la flacidez de la piel se debe a que ésta comienza a producir menos fibras de colágeno y elastina, la barrera protectora se debilita “y todo ello favorece que la piel se vuelva más fina, más seca y, por lo tanto, su tono se vea más apagado”.

En cuanto al momento en el que este envejecimiento en la piel empieza a ser más evidente, la Dra. Rosa del Río Reyes, directora de la Unidad de Estética Facial de Grupo Pedro Jaén, nos indica que suele ser “a partir de los 30 años, aproximadamente”.

Este dato, no obstante, no es estricto. Tal y como nos cuenta la Dra. Del Río, ese envejecimiento será más o menos acelerado y más o menos evidente en función de diversas causas: factores genéticos, del fototipo que tengamos, de factores externos y de los cuidados de la piel y estilo de vida que tengamos.

Primeros signos de flacidez 

Ya sabemos que en torno a los 30 años la producción de colágeno y elastina desciende, pero, ¿qué signos visibles pueden alertarnos de la necesidad de utilizar cosmética reafirmante?¿cuáles son las zonas del cuerpo donde comienza a manifestarse?

‣ La firmeza de la piel se va perdiendo por la pérdida progresiva de colágeno y elastina, dos proteínas y se manifiesta en toda la piel de cara y cuerpo.

‣ En la cara se empiezan a notar fundamentalmente en la zona alrededor de la boca (pronunciación progresiva de los surcos nasogenianos y las líneas de marioneta) y de los ojos (caída del párpado).

‣ Luego se va produciendo un descolgamiento progresivo de los tejidos de la línea mandibular, del cuello…

¿En qué partes del cuerpo aparece primero la flacidez?

Explican desde el Grupo Pedro Jaén que las zonas que más sufren son las que tienen una piel más delicada y fina y las que están más expuestas a agresiones externas, como puede ser la del contorno de los ojos, los labios, el cuello, el escote, las manos… A lo que la farmacéutica añada que las zonas corporales más afectadas suelen ser los muslos, el vientre y los glúteos. También la del brazo, surgiendo los llamados brazos de murciélago, dónde la piel tiende a estar más colgante.

¿Qué son los aceites reafirmantes?

La Dra. Del Río define los aceites reafirmantes como cosméticos formulados en forma de aceite “con ingredientes destinados a hidratar la piel y a estimular la síntesis de colágeno, con el fin de mantener la piel tersa y turgente”.

¿Qué activos o ingredientes se deben buscar en los aceites reafirmantes para que sean efectivos?

Lo ideal en los aceites reafirmantes es que vayan formulados con activos con diferentes funciones que actúen de forma sinérgica para conseguir esa firmeza en la piel. 

  • Activos hidratantes. Como por ejemplo el ácido hialurónico, por su gran capacidad para retener agua y evitar la pérdida de agua transepidérmica.
  • Restauradores del estrato córneo, como las ceramidas o los liposomas
  • Antioxidantes, como la vitamina C o la vitamina E

¿Cómo funcionan los aceites reafirmantes?

Como hemos indicado, los aceites reafirmantes tienen el objetivo de estimular la síntesis de colágeno y proporcionar una gran hidratación, de forma que se ralentice esa pérdida de firmeza de la piel y que se vea visiblemente más turgente, tersa e hidratada. 

No obstante, la Dra. Rosa Del Río advierte que los cosméticos tienen una acción muy limitada sobre la flacidez: “si buscamos un efecto más potente, hemos de complementarlo con tratamientos médico estéticos”.

Preguntas frecuentes sobre aceites reafirmantes

¿En qué momento de la rutina se debe incorporar el aceite reafirmante?

La Dra. Del Río indica que los aceites reafirmantes se apliquen “después de la limpieza y antes de extender el fotoprotector”. Es decir, ocupando el paso de la hidratación.

Por su parte, Selena Sainz los considera perfectos para utilizar al final del día, tras la ducha o en un momento de relajación: “al estar mayoritariamente compuestos por aceites naturales y extractos de plantas, su aroma nos aportará un efecto descanso que nos hará recobrar el equilibrio emocional y disminuirá el estrés del día”.

Como siempre, lo más importante para asegurar la efectividad de los aceites reafirmantes, al igual que ocurre con el resto de cosméticos, es la constancia.

¿Se pueden usar a diario?

Sí, en pieles sanas no existe ninguna contraindicación para que los aceites reafirmantes formen parte de la rutina diaria de cuidado de la piel.

¿Vale cualquier aceite reafirmante para todo tipo de piel?

“Todos los cosméticos de nuestra rutina de cuidado facial deben estar adaptados al tipo de piel que tengamos, a las necesidades concretas de cada momento y a las posibles patologías cutáneas que pueda haber de base” nos explica la dermatóloga.

Por este motivo, no todos los aceites reafirmantes serían óptimos para todas las pieles, pero existen en el mercado cosméticos formulados específicamente para cada tipo y necesidades de la piel, por lo que es cuestión de encontrar el que más se pueda adaptar a lo que buscamos.

¿Son efectivos los aceites reafirmantes?

Según las expertas, un aceite reafirmante por sí solo no será muy efectivo. Siempre hay que acompañarlos de una buena alimentación y deporte frecuente. De esta forma, el aceite ayudará a reducir la flacidez. También nos advierten de que los cosméticos tienen una acción muy limitada sobre la flacidez y que si buscamos un efecto más potente, hemos de complementarlo con tratamientos médico estéticos.

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